13/08/2020 -  2 minutos de lectura Por Paula Chinchilla

El error más grande que puede cometer una empresa es pretender que todos sus clientes son iguales. ¡Todos son diferentes! Todos tienen gustos y necesidades diferentes, algunos ya saben lo que desean comprar y otros deben consultar varias fuentes o páginas antes de adquirir un producto o servicio.

Adaptación digital para sobrevivir en un mundo con Covid-19

 Pero lo que tienen en común ambos perfiles es que para su negocio deben ser igual de importantes. Ahora bien, no en vano aquellas empresas que conocen a fondo a sus usuarios tendrán siempre un as bajo la manga para saber cómo venderles, cómo dirigir su comunicación hacia ellos y cómo posicionar ciertos productos con ciertos usuarios.

 

Estas son ocho claves para que haga una radiografía de sus clientes actuales y potenciales:

  1. Conocer sus rangos de edades y género
  2. Saber cuál es su nivel socioeconómico y educativo
  3. Cuáles son sus motivaciones y necesidades
  4. Cómo son sus hábitos de compra, ya sea en puntos físicos o digitales
  5. Cuáles son sus pasatiempos
  6. Qué redes sociales utiliza
  7. Qué tan tecnológico es, qué dispositivos y aplicaciones usa 
  8. Saber ¿qué dolores han experimentado con un producto, ya sea suyo o de su competencia?

Uno de los principios básicos del Diseño UX o Diseño de Experiencias de Usuario es precisamente eso, ayudarle a mapear a sus clientes y a obtener en el camino información valiosísima y estratégica para su negocio.

 Una vez mapeados sus usuarios, tendrá claridad sobre cómo enfocar su página web o tienda en línea; por ejemplo, no es lo mismo saber que a sus usuarios solo le gustan las tenis de cierta marca y tener esas tenis ´escondidas` en su e-commerce.

 O que sus clientes tengan un rango de edades de 25-35 años y que usted solo ofrezca tallas de camisas para adolescentes. Ese match entre usuarios/productos es fundamental.