Antes de responder a esta pregunta vamos a repasar algunos datos de una tendencia que ya dejó de serlo para convertirse en un hecho.
- En la actualidad el contenido en video representa casi el 80% del tráfico total de internet, y se prevé que ese porcentaje siga en aumento durante los próximos años.
- Youtube es el segundo “buscador” más utilizado después de Google.
- Más de la mitad de los latinoamericanos ven videos en YouTube antes de efectuar una compra.
- YouTube fue la app número uno de iOS en 2018.
- El 70% de los usuarios millennials de YouTube vieron un video para aprender cómo hacer algo nuevo durante el pasado año.
Para que mi fanatismo por la red social del “play” no sea tan evidente, podemos observar otros fenómenos, como por ejemplo la “reciente” aparición de IGTV, o la ya conocida transformación de Facebook en su pasaje de contenido estático a casi 100% contenido de video.
Por otra parte, la aparición de múltiples herramientas para el almacenamiento, creación y gestión de video, tales como HubSpot, y ni hablar de la mejora constante en las características de las súper cámaras que traen incorporadas nuestros smartphones, impulsan los contenidos audiovisuales.
Al mismo tiempo la carrera comercial de las principales compañías en materia de equipamiento fotográfico como Canon, Sony, Nikon y Panasonic empiezan a hacer cada vez más foco en el diseño de mejoras en las ya potentes capacidades de grabación de video de sus productos.
Sin dejar de mencionar que millones de fotógrafos ya han saltado a la vereda de los videógrafos y muchos empiezan a preguntarse si la fotografía seguirá perdiendo popularidad en los próximos años.
Claro que sería un poco prematuro hablar de la desaparición del contenido estático, pero si unimos todas las señales y escuchamos todas las alarmas que ya están sonando, no sería inexacto hablar de una contracción real del contenido estático y, por qué no, de una revolución del contenido en video que llegó para quedarse.
3 preguntas de negocio en torno al video
- ¿Cómo hacemos para rediseñar o capacitar a nuestros equipos frente a esta nueva realidad, donde la producción de contenidos de video es cada vez más necesaria y competitiva?
- ¿Cómo logramos, frente a una demanda cada vez más audiovisual, que el impacto de la generación de contenidos de video de calidad no genere en los clientes un desborde de costos que lesione la capacidad de inversión o la retracción en las dimensiones y profundidad de las campañas?
- Y la última pregunta pero quizás la más importante: ¿Cómo podemos capitalizar esta nueva revolución audiovisual como oportunidad de negocio para las agencias o consultoras que deben empezar a competir con productoras, por una parte de una torta que cada vez será más y más grande.
Un caso para “mirar”
Un gran ejemplo de quien supo y pudo capitalizar esta revolución, es Vorterix, una radio argentina que haciendo una gran lectura sobre este fenómeno y adelantándose a todos.
Hace ya un tiempo que llenó de cámaras sus estudios de radio e incorporó streaming de video en vivo a través de Youtube a lo largo de toda su programación.
Pero no simplemente fijando cámaras “testigo” aburridas, que solo permiten ver lo que pasaba en sus programas -como ya hemos visto en muchas emisoras-, sino equipando sus estudios con múltiples puntos de observación, pantallas, cromas y directores audaces que modificaron la concepción de lo que significa hoy un programa de radio.
Resignificándolo por completo y convirtiéndolo en un concepto único que ya no sólo se escucha en el auto de camino a casa o al trabajo, sino que además puede vivirse verse y consumirse como cualquier serie de Netflix, con sus respectivos protagonistas, guiones, actuaciones, historias y aventuras.
Acá uno de los tantos momentos que se viven a diario en sus transmisiones.
Y para los que quieran entender un poco mejor de qué se trata pueden ver, escuchar y curiosear todos sus contenidos y transmisiones aquí.