26/04/2021 -  2 minutos de lectura Por Alejandra Lamas

A lo largo del tiempo, con mayor frecuencia escuchamos sobre el diseño centrado en el usuario, o más conocido como UX (User experience) una metodología que ha venido a evolucionar la manera de ejecutar proyectos, enfocados  en conocer las necesidades de los usuarios, alineándolo a los objetivos de negocio y sin dejar de lado las limitaciones técnicas.

Sin embargo, como seres humanos, nos cuesta expresar lo que hacemos o sentimos al tener una experiencia, ya sea con un producto o un servicio.

Es por esto, que la investigación centrada en el usuario utiliza la etnografía y se enfoca en observar las prácticas culturales de los diferentes grupos sociales  involucrándose con ellos, con el fin de entender y contrastar, sobre todo, lo que dicen y hacen verdaderamente las personas.

Esto nos permite hacer una adecuada interpretación de las acciones, sucesos y los roles que tiene cada uno de los individuos, para traducirlos en requerimientos que más tarde se convertirán en soluciones.

Para que este proceso tenga éxito, es importante respetar 4 reglas fundamentales, que los investigadores centrados en el usuarios llamamos “las reglas de oro”:

1.Definir los perfiles del usuario

Esto nos permite segmentar y entender que no todos los usuarios cuentan con las mismas necesidades o puntos de dolor, definiendo desde un inicio los perfiles específicos con los que vamos a trabajar, con el fin de evitar incluir personas poco afines a nuestro producto y servicio.

2.Dar vida a un perfil de usuario

Humanizar estos perfiles nos permite conocer a estas personas, caracterizando sus objetivos, metas y necesidades y a su vez definiendo sus datos demográficos. 

4.Empatizar

Para empatizar, aplicamos  métodos y herramientas para conocer mejor al usuario y entender más de sus necesidades, objetivos y metas.

Algunas de las herramientas más utilizadas y que nos facilitan cumplir con esta regla son: El mapa de empatía, entrevistas y test con el usuario, esto por mencionar algunas, sin embargo existen infinidad de herramientas que nos permiten conocer más a profundidad el perfil con el que estamos tratando.

3.Validar si las conclusiones obtenidas son verdaderas

Entendiendo que nunca debemos salirnos de nuestro segmento meta, la última pero no menos importante regla de oro, nos dice que debemos validar la información encontrada.

Y es que, si bien es cierto, nuestros perfiles seleccionados nos brindan información de calidad, uno de los requerimientos de la investigación centrada en el usuario es crear soluciones que brinden satisfacción a todo un segmento, dejando por fuera los caprichos de algunos pocos.

Aplicando estas 4 reglas de oro comprobamos que, la investigación centrada en el usuario es una de las metodologías más acertadas para ir con paso seguro y firme a cumplir los objetivos comerciales de nuestros clientes, ya que, cuando nos centramos en entender a nuestros usuario, estos nos guían con fiabilidad y sencillez hacia el éxito.